Mucho se
habla en la actualidad sobre los emprendedores, todo el mundo tiene que ver con
ellos, todos opinan al respecto y son vistos como una novedad en estos tiempos
de crisis.
Pero vale la
pena preguntarse ¿qué es un emprendedor? Es decir, ¿que se necesita para ser un
emprendedor? o acaso ¿todos podemos serlo de alguna manera? Pienso que
emprendedores somos al menos la mayoría, porque según mi punto de vista el requisito
indispensable es estar inconformes con nuestra realidad y creo que de
inconformes pues todos tenemos un poco.
Originalmente
el término emprendedor se refiere a una persona que inicia una actividad por
medio de una empresa y en ese inicio asume los riesgos económicos que deriven
de la misma. Sin embargo, y según mi parecer ese término va muchísimo más allá, ya que para emprender necesitamos ser
creativos, audaces, desafiar la percepción que tiene la gente de lo que nos
rodea y como alguna vez leí en alguna parte, pues hacer lo de siempre pero de
manera diferente. Y es que resulta ser éste último punto el que diferencia a los
emprendedores del resto: la innovación.
Un emprendedor
no es quien simplemente tiene un nuevo negocio, o quien tiene una empresa. Cuando
el emprendedor actúa pone en riesgo mucho más que el dinero. El emprendedor es
cuestionado y criticado diariamente, por el simple hecho de “emprender” y
pensar diferente, solo porque no hace las cosas de la manera habitual, o de la
forma en que la generalidad está acostumbrada.
Pienso que los
emprendedores nos enfrentamos a una auto critica muy dura, y al temor de que
todo salga mal. Pero es el entusiasmo y la fe que le tenemos a nuestra
innovación lo que hace que los demás crean en nosotros. Y es que si no creemos
en nosotros mismos ¿quién lo hará?
Hace pocos
días, discutiendo una nueva oportunidad una persona me pregunto: ¿No tienes
miedo? Y yo conteste: No, miedo no… yo lo que voy es para adelante… Pues creo
que esa respuesta, refleja el espíritu de todo emprendedor… No consiste en no
tener miedo, sino en enfrentarlo a los fines de lograr nuestras metas.
De lo que será
de nuestras ideas… pues creo que ningún emprendedor lo sabe, lo único que
sabemos es donde comenzamos y tenemos alguna idea de la ruta que seguiremos…
más del futuro no sabemos nada, solo sabemos que queremos triunfar y que
nuestras ideas e innovaciones dentro de
nuestros campos profesionales o de trabajo sean un éxito.
Obviamente no
podemos asegurar el éxito, pero al menos debemos dar todos los pasos que estén
a nuestro alcance para lograrlo, debemos intentar todo para hacer que nuestra
idea se haga realidad. Muchas veces será difícil, muchas veces estaremos
tentados a volver al camino de la comodidad, pero es en esos momentos donde
debemos volver a enfocarnos y determinar nuevamente nuestro objetivo y si no
nos sirve ese camino, pues cambiarlo para lograr nuestro fin.
Como reflexión final, aunque de
emprendedores todos tenemos algo, pues al final pienso que no todos pueden
denominarse así… porque para ser emprendedor se necesita compromiso, pero lo
mejor del caso es que es compromiso contigo mismo de que te exigirás día a día
por lograr lo que quieres.
Bertha Elena
Guzmán
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